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A nuestro modo todos estamos en lo cierto. Tenemos nuestras verdades y con ellas fraternizamos y sentimos lo que vemos, lo que oímos y, por encima de todo, lo que el alma y la cabeza nos dejan percibir como nuestra autenticidad. Tener manifiesto personal e intransferible es «rara avis» en el colectivo, que por algo suma y está acostumbrado a pensamientos con ataduras para hacer más grande el paquete.
Por siempre el individuo y la masa parecen haber estado separados ya que el individuo en la masa deja de serlo y la masa es precisamente esa magnitud física por no tener individualidad. Estas referencias metafóricas nos llevan a lo que ocurre en el día a día mundial y la primavera llega para insistir en ello haciéndonos mirar al cielo, esa pantalla que visiona las bandadas. Las aves hacen dibujos con movimientos etéreos y en grupo presentan la plasticidad individual, los bailes convertidos en espectáculo con formas en el cielo, ejecutando armonías y detectando la dirección y la velocidad. Todos al mismo ritmo para alcanzar la seguridad que da el grupo. Si miramos abajo, en la tierra, y pisando firme, el concepto que se baraja entre los mamíferos es el de manada.
Las formas que en el aire nos representan los estorninos pintos, u otras aves, son siluetas complejas, vaivenes contra el cielo. En El Salvador y en México, igual que en el conjunto de países hispanohablantes, el término utilizado para describir este fenómeno es el de parvada, que en gallego viene a decir que es cosa de tonto, lo que sería una tontada. La lengua es tratada desde diversas disciplinas y encontrar el significado de lo que uno quiere decir tiene su premio. En Cádiz se está celebrando el IX Congreso Internacional de la Lengua Española. Allí Cádiz-2023 es hasta el treinta de marzo el encuentro para hablar de lengua española, mestizaje e interculturalidad.
El respeto mutuo nos viene a poner sobre la mesa el tratamiento «Vos» argentino, paraguayo e uruguayo, lo que conocemos como «voseo» y que golpea cada vez más en contra del tú porque este parece habernos confirmado que la campechanía contribuye a perder el respeto. Ganar terreno es en este caso perder individualidad. Vos y ustedes siguen teniendo vigencia al otro lado del charco y con esta actitud contemplativa se ven hábitos que sobrepasan las libertades con puestas en escena de mucha afabilidad. A la pluma me viene versión con la intensidad del pensar diferente. A la masa la manada al tú un vos respetuoso.
Pilar Falcón